27 oct 2010

Mamá, de mayor quiero ser artista... y rica, y famosa y...

Los que estudiamos una carrera como la de Publicidad y RR.PP. tenemos la suerte de poder elegir entre distintos perfiles a la hora de decidir qué queremos ser (profesionalmente hablando). Pero esto también puede resultar un inconveniente cuando no tenemos muy claro que va a ser de nuestra vida ni hacía donde queremos encaminarla. Y es entonces cuando llega la temible pregunta, ¿qué quiero ser de mayor?
Entre las distintas opciones que podría elegir me encantaría, sin duda, trabajar como periodista o formar parte de un gabinete de comunicación y relaciones públicas. Tras cuatro años de carrera he llegado a esta conclusión porque me he dado cuenta de que lo que realmente me gusta es la comunicación y, por tanto, comunicar. Para ello es imprescindible tener algo que decir y que ese algo sea de interés para el público.

La cuestión es que me he puesto a indagar un poquito por Internet para tratar de conocer algunas figuras relevantes en estos mundillos y he llegado a una conclusión, o mejor dicho, a varias.

En primer lugar, que en el perfil de RR.PP. es difícil encontrar a una persona que destaque en singular, lo más común es hallar agencias o gabinetes que son conocidos y sirven como punto de referencia en el sector por el trabajo que llevan a cabo. Un trabajo en el que se destaca la colaboración en grupo, de ahí que sea complicado mencionar a alguien brillante en particular.
Y en segundo lugar, que son muchos los profesionales del periodismo. Algunos llegan a destacar, otros no. Pero es éste un mundo de modas pasajeras, por lo que el que hoy está en la cumbre y es aclamado y seguido por todos puede que mañana sea despojado de su trono y desterrado al olvido. Y reconozco que eso me da miedito.

En cuanto a las habilidades necesarias… un poco más de lo mismo: capacidad innovadora, saber trabajar en equipo, estar siempre informada de lo que ocurre y no dejar nunca de aprender y formarme, el saber estar, el saber transmitir, poseer cualidades para la oratoria, tener idiomas (aquí es donde pincho)… etc.
Pero, y ante todo, sentir pasión por el trabajo que realicemos, considero que es fundamental.

22 oct 2010

EgoSurfing

El motivo de esta nueva entrada en el blog es algo más complicada en mi caso, porque como bien saben mis allegados a mí se me conoce con dos nombres.
Mª José (uf, como lo odio) es el nombre que figura en el registro y por lo tanto el que utilizo para todas las cuestiones serias y de peso: papeleos, cosas de la uni, etc., etc.
Pero como el nombre que legítimamente me correspondía no dejaron que me fuera adjudicado (por esto de que siempre hay personas por la vida con un carácter muy afable y tolerante), mis progenitores decidieron hacer uso de él a pesar de que no pudiera ser mi nombre “oficial”. Y esta es la historia, larga aunque brevísimamente explicada, de porque los que me conocen me llaman Mireia y no (¡¡never!!) Mª José.

Pues bien, todo este rollo viene para explicar porque en mi caso el EgoSurfing ha sido doble.
Por un lado, he introducido mi nombre oficial en Google y…tachán, tachán!! 81.400 resultados, sin comillas claro está. Cuando acotamos la búsqueda con las comillas la cosa se reduce, y bastante. Entonces el conocido buscador tan sólo me otorga 8 resultados… ¡pero qué digo sólo! Ya es algo, y para empezar creo que no está tan mal.
Las 8 páginas a las que me remite el buscador tienen todas que ver con los diferentes trabajos que he llevado a cabo en estos años de universidad. Desde una página web que realicé en 2009, pasando por el blog del que formé parte el año pasado y la página slideshare donde aparecen los trabajos de la asignatura de Creatividad del curso pasado.

Por otra parte, y como no podía ser de otro modo, también he realizado la misma búsqueda pero en este caso con el nombre de Mireia. Y en esta ocasión Google me ofrece 17.600 resultados diferentes, de los cuales 8 están relacionados conmigo. Como ya he dicho, este nombre lo utilizo para cosas “no oficiales”, así que las páginas vinculadas a este nombre son las de la red social Facebook y la web de 123people, un buscador de personas gratuito en tiempo real.

El estar presente en las redes sociales es un factor clave y fundamental hoy en día y más para las personas que en un futuro (no muy lejano) nos queremos dedicar al mundo de la comunicación, ya que como muchos expertos afirman: si no estás en ninguna red social, no existes. Siempre sabiendo gestionar nuestra imagen de una forma positiva y no utilizando estas plataformas como meros escaparates de nuestro ocio nocturno (fiestas, botellón…).

De momento, estoy conforme con los resultados que aparecen en Internet vinculados a mi nombre, pero está claro que no quiero que la historia finalice ahí.
Lo que tengo bastante claro es que quiero que mi carrera laboral se desenvuelva en el sector de los medios de comunicación (prensa, televisión, radio…) o, en cualquier caso, siempre en un trabajo relacionado con la comunicación y las RR.PP.

6 oct 2010

WAIT, WAIT, WAIT...

Espera, espera porque me estoy agobiando. No digo que seamos los más optimistas del mundo y que pensemos que nos lloverán las ofertas de trabajo cuando hayamos terminado nuestra carrera, pues eso sería ya no ser optimista sino más bien un iluso. Está claro que eso no va a suceder, ni ahora ni nunca (o al menos no en un futuro próximo). Pero debemos tener una mínima esperanza y confiar en nosotros mismos y en nuestras posibilidades a la hora de ponernos en marcha, porque si no, el motor no arranca.

Aunque lo cierto es que leer todos esos comentarios sobre lo negro que pinta nuestro futuro alienta más bien al desánimo. Parece ser que el panorama fuera de nuestras fronteras pinta algo mejor que el patrio o, al menos, eso es lo que refleja la opinión popular. Si desde hace ya algún tiempo una servidora tenía más o menos claro que su futuro no se encontraba en estas tierras, ahora creo que la idea de tener que dejar lo conocido a un lado y partir hacia la aventura va tomando una forma cada vez más sólida.

Pero bien, volviendo al tema que hoy nos toca, creo que lo principal y una de las características fundamentales que debe poseer alguien que se dedica (o pretende dedicarse) al mundo de la comunicación es la confianza en sí mismo.
Hemos de ser capaces de transmitir a quién tenemos enfrente que estamos seguros de nosotros mismos, de tal modo que aunque no sea así, la persona que nos esté observando quede totalmente convencida de lo contrario.
La originalidad, el ser innovadores, proactivos, no tener miedo a los cambios y las ganas de aprender y diferenciarse de los demás son factores clave que nos ayudarán a encontrar trabajo en el mundo de la comunicación. No obstante, son cualidades que nos ayudarán pero no nos garantizan el acceso a un trabajo, ya que si fuera tan sencillo no existiría problema ni miedo alguno.

Hemos de ser la chispa (al igual que la famosa bebida) que una empresa, institución, agencia, etc., etc., necesita. Siempre pacientes, con buena predisposición y ganas de trabajar. Que sencillo, ¿no?